El Parlamento Europeo aprobó propuestas para apoyar a las industrias de gran consumo energético
El Parlamento Europeo adoptó el pasado jueves una resolución clave destinada a respaldar a las industrias de gran consumo energético en su transición hacia procesos industriales más limpios, destacando su papel estratégico en la economía de la Unión Europea. El texto subrayó la urgencia de adoptar medidas para reforzar su competitividad, impulsar la descarbonización y garantizar el suministro de materiales fundamentales.
Las industrias intensivas en energía —tales como la química, el acero, el papel, el cemento y el vidrio— fueron reconocidas como esenciales para la creación de empleo y la autonomía estratégica del continente. No obstante, se advirtió que estos sectores enfrentaban serios desafíos en su camino hacia la sostenibilidad. La resolución destacó la necesidad de aplicar una combinación de tecnologías para reducir los precios de la energía y evitar dependencias estructurales, señalando la electrificación como un eje clave.
El texto parlamentario identificó diversos factores que limitaban la competitividad industrial europea, entre ellos, las diferencias en los precios de la energía frente a países competidores, la volatilidad de los combustibles fósiles, la fragmentación del mercado energético y una compleja arquitectura normativa y financiera. También se puso de manifiesto que el régimen de comercio de derechos de emisión se veía presionado por las transformaciones del mercado y el uso desigual de los ingresos generados en los Estados miembros, dificultando el apoyo efectivo a la descarbonización industrial.
Ante este escenario, el Parlamento instó a acelerar la autorización de proyectos de energías limpias, avanzar en la implementación de la reforma del diseño del mercado eléctrico y fomentar un sistema energético más integrado. Asimismo, propuso explorar mecanismos para desvincular los precios de la electricidad de los de los combustibles fósiles, y reclamó mayor inversión en infraestructuras de red.
Los eurodiputados también señalaron que simplificar las normas y garantizar la disponibilidad de materias primas fundamentales y secundarias resultaba esencial para atraer inversión privada, reducir la dependencia de terceros países y facilitar la transición ecológica.
En el plano global, el Parlamento insistió en la necesidad de actuar frente a la competencia desleal, defendiendo la aplicación efectiva del Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono (MAFC) y el impulso de mercados líderes para productos industriales limpios fabricados en Europa. También subrayó la importancia de proteger a los trabajadores y regiones afectadas por los cambios estructurales, asegurando que la industria europea mantuviera su competitividad durante el proceso de descarbonización.
Durante el debate, el eurodiputado Giorgio Gori (S&D, Italia), quien lideró las negociaciones del texto en la Comisión de Industria del Parlamento, declaró:
«No tenemos tiempo que perder: tenemos que actuar para garantizar que la industria europea protege y salvaguarda sus puestos de trabajo. La innovación tecnológica necesaria para acelerar la descarbonización de las industrias intensivas en energía requiere inversiones sustanciales, que la UE tiene la responsabilidad de acompañar con recursos públicos. Mientras tanto, estas industrias deben ser protegidas: contra el dumping, los aranceles, la competencia desleal y el exceso de capacidad basada en subsidios desde otros países, para evitar la fuga de carbono y la deslocalización de empresas fuera de Europa.»
La resolución fue aprobada por asentimiento en el pleno del Parlamento.
Este posicionamiento se basó en informes previos —como los informes Draghi y Letta— y en las propuestas de la Comisión Europea para un Pacto por la Industria Limpia y un Plan de Acción para la Energía Asequible, conformando así una estrategia integral para la descarbonización del sector industrial intensivo en energía en la Unión Europea.