Europa da su aprobación definitiva al Reglamento de Materias Primas Fundamentales
El Consejo ha adoptado el pasado mes el Reglamento que establece un marco para garantizar el suministro seguro y sostenible de materias primas fundamentales, más conocido como el Reglamento de Materias Primas Fundamentales. Se trata del último paso del procedimiento decisorio.
El Reglamento establece unos plazos claros para los procedimientos de autorizaciones de los proyectos de extracción de la UE, permite a la Comisión y a los Estados miembros reconocer un proyecto como estratégico, exige evaluaciones de riesgos de la cadena de suministro, exige a los Estados miembros que dispongan de planes nacionales de exploración y garantiza el acceso de la UE a las materias primas fundamentales y estratégicas mediante unos parámetros de referencia ambiciosos de extracción, tratamiento, reciclado y diversificación de las fuentes de importación.
Con el Reglamento de Materias Primas Fundamentales queremos convertir la retos de nuestras dependencias en autonomía estratégica y en una oportunidad para nuestra economía. Este acto legislativo impulsará nuestro sector minero, mejorará nuestras capacidades de reciclado y transformación, creará puestos de trabajo locales y de buena calidad y garantizará que nuestra industria esté preparada para las transiciones digital y ecológica.Jo Brouns, ministro flamenco de Economía, Innovación, Trabajo, Economía Social y Agricultura
Garantizar el acceso a las materias primas fundamentales
El texto definitivo adoptado hoy define dos listas de materiales (34 fundamentales y 17 estratégicas) que son cruciales para las transiciones ecológica y digital, así como para las industrias de la defensa y espacial. El Reglamento establece tres parámetros de referencia para el consumo anual de materias primas de la UE: el 10 %, de extracción local; el 40 % transformadas en la UE y el 25 %, procedentes de materiales reciclados.
Para facilitar el desarrollo de proyectos estratégicos, los Estados miembros crearán puntos de contacto únicos en el nivel administrativo pertinente y en la fase correspondiente de la cadena de valor de las materias primas fundamentales.
Los proyectos de extracción recibirán sus permisos en un plazo máximo de 27 meses, mientras que los proyectos de reciclado y procesamiento deben recibir sus autorizaciones en un plazo de 15 meses, con limitadas excepciones a fin de garantizar una interacción importante con las comunidades locales afectadas por los proyectos y una evaluación de impacto ambiental adecuada en casos complejos.
Las grandes empresas que fabrican tecnologías estratégicas (por ejemplo, los productores de baterías, hidrógeno o generadores renovables) llevarán a cabo una evaluación de riesgos de sus cadenas de suministro para detectar vulnerabilidades.