Recuperar el paisaje y reforzar la resiliencia climática: Galicia lidera una actuación piloto en el estuario del Miño
La intervención en Tomiño, O Rosal y A Guarda mejora la biodiversidad y la infraestructura verde del Baixo Miño como parte del proyecto europeo Green Gap
El estuario del río Miño, uno de los enclaves naturales más emblemáticos de la Eurorregión Galicia–Norte de Portugal, ha sido objeto de una actuación integral de recuperación ambiental destinada a mejorar su resiliencia frente al cambio climático y reforzar sus valores paisajísticos, ecológicos y sociales.
La intervención, que abarca 14.000 m² de superficie y beneficia directamente a los ayuntamientos de Tomiño, O Rosal y A Guarda, se enmarca dentro del proyecto europeo Green Gap, liderado por Galicia a través del Instituto de Estudios del Territorio (IET). Con una inversión cercana a los 200.000 euros, esta es la primera de las siete actuaciones piloto que contempla la iniciativa, con financiación del programa Interreg España-Portugal 2021-2027.
Naturaleza restaurada, acceso mejorado
Entre las principales mejoras realizadas destaca la rehabilitación completa del observatorio ornitológico de A Pasaxe en A Guarda, reconstruido desde cero para facilitar el avistamiento de aves sin alterar el entorno natural. También se renovó el observatorio de A Xunqueira, donde se realizaron tareas de limpieza, reposición de elementos dañados y sustitución de la antigua pasarela de madera por una nueva estructura de aluminio, más duradera y resistente.
La intervención también ha incluido la eliminación de especies invasoras como acacias, cañas, palmas o hierba de la pampa, y la reposición de cierres y elementos protectores en los observatorios, además del desbroce y retirada de elementos abandonados o vegetación muerta.
Estas acciones contribuyen directamente a mejorar la conectividad ecológica de la zona, fortalecer los ecosistemas autóctonos y fomentar un turismo sostenible basado en la educación ambiental y el disfrute respetuoso del paisaje.
Infraestructura verde para un futuro común
El proyecto Green Gap nace con el objetivo de crear una red de infraestructuras verdes en el espacio transfronterizo Galicia–Norte de Portugal, capaces de afrontar los desafíos del cambio climático, proteger la biodiversidad y generar beneficios directos para las comunidades locales. En total, se ejecutarán siete proyectos piloto, tres de ellos en Galicia.
Además de la actuación ya ejecutada en el estuario del Miño, están previstas otras dos intervenciones en territorio gallego: una restauración ambiental en el entorno del embalse de As Conchas (Muíños), y la creación de bandas de vegetación autóctona en montes vecinales de Pontevedra.
El enfoque del proyecto combina criterios técnicos, científicos y de participación ciudadana, alineado con la Estrategia de Infraestructura Verde y Biodiversidad de Galicia y con las prioridades del Pacto Verde Europeo.
Un modelo exportable
Gracias a este tipo de intervenciones, Galicia refuerza su papel como territorio líder en planificación ambiental transfronteriza, con capacidad para coordinar acciones integradas que tienen impacto a escala local y regional. La zona del Baixo Miño, además de su riqueza paisajística, se consolida como laboratorio natural para ensayar soluciones innovadoras de adaptación al cambio climático, recuperación de hábitats y promoción del ecoturismo.
La actuación integral en el estuario del Miño estará completamente finalizada antes de que finalice el año 2025, y supone un referente en la cooperación entre administraciones, ciencia y territorio en favor de un entorno natural más resiliente, accesible y sostenible para las generaciones presentes y futuras.
