Sogama, repartió ya de forma gratuita más de 22.000 composteros entre las 468 entidades adheridas en toda Galicia al programa de compostaje doméstico que impulsó la empresa pública hace más de una década.
Del total de entidades adscritas a la iniciativa, con la que se busca promover la autogestión de la materia orgánica y dar a conocer sus beneficios ambientales, económicos y sociales, la mayoría son ayuntamientos (228) y centros educativos (207) aunque también hay 32 colectivos sociales, fundamentalmente asociaciones.
Cabe subrayar que este programa es un claro ejemplo de la apuesta del Gobierno gallego por la economía circular al tiempo que contribuye a reducir la producción de residuos, a reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera y, además, a recuperar una práctica tradicional muy ligada al modo de vida en el rural gallego.
En este sentido y dado que la materia orgánica representa alrededor del 37 % de la composición media de una bolsa de basura tipo, con la recuperación en origen se evita su depósito en el contenedor genérico, lo que permite que los servicios municipales puedan disminuir la frecuencia de recogida y transporte de la basura convencional con el consiguiente ahorro de costes, tanto en transporte como en gestión.
Además, desde el punto de vista social también cabe subrayar que contribuye a recuperar y poner en valor una práctica tradicional en el rural gallego como es la separación de la materia orgánica para alimentar el ganado o mediante su transformación en compost, un abono natural con excelentes propiedades para plantas y cultivos, ya que aportación nutrientes al suelo e incluso lo protege frente a plagas y enfermedades.
A través de los ayuntamientos y de forma totalmente gratuita, Sogama distribuye los recipientes para compostar, con una capacidad de 400 litros y fabricados con materiales reciclados y reciclables, siendo su función propiciar que el proceso de autogestión de la materia orgánica se lleve a cabo de forma cómoda, higiénica y eficiente.
Para esto, es necesario que las viviendas, escuelas o agrupaciones participantes dispongan de terreno -huerta, jardín o tierras de cultivo- en el que poder aplicar el abono resultante, cerrando así el ciclo de recuperación de la materia orgánica en un claro ejemplo de economía circular.
Información y formación
Además de suministrar gratuitamente los composteros, para que todas las entidades y personas adheridas dispongan de la información y de la formación necesarias para que el compost resultante cumpla con los estándares exigidos, Sogama se encarga también de editar material divulgativo de apoyo con todos los pasos a seguir.
Ejemplo de esto son los manuales didácticos que se entregan con cada compostero y en los que se describe la técnica a llevar a cabo: desde la propia localización del compostero, que debe estar en contacto directo con la tierra para facilitar la entrada de los microorganismos descomponedores, hasta la relación de materiales que deben y no deben depositarse en el mismo y el control de parámetros tales como el oxígeno, la temperatura y la humedad, que influyen de forma decisiva en el resultado final.
Asimismo, y en coordinación con los ayuntamientos y el resto de entidades adheridas, personal de Sogama también imparte cursos de formación presenciales en los que se explica a los usuarios la operativa y las técnicas a aplicar, además de resolver sus posibles dudas.
