CampañasEntidades PúblicasSensibilización

El autocompostaje escolar, un instrumento didáctico de apoyo para avanzar hacia la economía circular

Con el objetivo de fomentar el autocompostaje en las escuelas y que la comunidad educativa tome conciencia de la importancia que tiene la recuperación de la materia orgánica en origen, dados sus múltiples beneficios ambientales, el programa liderado por Sogama en Galicia, contempla también la adhesión de centros escolares interesados en fomentar la autogestión de restos orgánicos mediante su transformación en compost.

A día de hoy, un total de 186 colegios de las cuatro provincias gallegas han decidido formar parte de esta iniciativa, asumiendo la Sociedad la dotación de los medios materiales y didácticos necesarios.

En este marco, Sogama ha repartido entre los mismos 235 compostadores, con capacidad para 390-400 litros, y fabricados con materiales reciclados y reciclables. Condición indispensable es que los centros cuenten con servicio de comedor o bien que generen una cantidad importante de restos orgánicos procedentes de las meriendas de los pequeños. Asimismo, deben disponer de terreno (huerto y/o jardín) en el que aplicar el compost resultante, cerrando así el ciclo de valorización de la materia orgánica mediante su transformación en un abono natural de alta calidad y con excelentes propiedades fertilizantes para el suelo, ya que, además de aportarle nutrientes, lo protege frente a plagas y enfermedades.

El profesorado coincide en señalar que elaborar su propio compost en el centro representa una oportunidad para que los escolares tomen conciencia de la cantidad de desechos orgánicos producidos cada día y de las posibilidades de valorización que éstos tienen, evitando que acaben en el contenedor genérico.

FORMACIÓN

Los educadores de Sogama imparten en las escuelas charlas sobre autocompostaje en las que explican todo el proceso y la dinámica a seguir para obtener un compost de alta calidad que cumpla con los requisitos recogidos en la normativa vigente y pueda ser aplicado al suelo con garantías y sin restricciones.

Además, en muchos casos se ha observado que niños y niñas que participan en esta iniciativa, dan continuidad a la misma en sus hogares, donde también se elabora abono con la materia orgánica generada.

Cada vez son más los centros educativos interesados en sumarse a este programa, que Sogama refuerza con recursos pedagógicos sobre la recogida selectiva de residuos  en general, pues, más allá del compostaje, se presta atención a los materiales que deben -y no deben- depositarse en los distintos contenedores ubicados en  las vías públicas: amarillo, para envases de plástico, latas y briks; azul, para papel y cartón; iglú verde, para envases de vidrio;  contenedor marrón, para materia orgánica (en proceso de implantación en Galicia) y convencional, para la fracción resto.