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Sogama ha repartido en Galicia, y de forma gratuita, cerca de 20.000 compostadores domésticos

Sogama ha repartido de forma gratuita cerca de 20.000 compostadores domésticos con el objetivo de promover la autogestión de la materia orgánica en origen y sus beneficios ambientales, económicos y sociales.

A día de hoy son un total de 440 las entidades adscritas a esta iniciativa (224 ayuntamientos, 186 centros educativos y 30 colectivos sociales) y la empresa pública confía en que el interés vaya creciendo, ya que se trata de un programa que contribuye a prevenir y a reducir la producción de residuos, así como a aminorar las emisiones de CO2 a la atmósfera. Al reciclar los restos orgánicos en el propio hogar, que vienen a representar en torno al 40% de la composición media de una bolsa de basura tipo, se evita su depósito en el contenedor genérico, posibilitando que los servicios municipales puedan ver disminuida la frecuencia de recogida y transporte  del residuo convencional.

Desde el punto de vista social, cabría destacar la recuperación de una práctica tradicional en el rural gallego, como es la segregación de la materia orgánica para alimento del ganado y/o elaboración de compost, un abono natural de alta calidad con extraordinarios beneficios para plantas y cultivos, ya que, además de aportar nutrientes al suelo, lo preserva frente a plagas y enfermedades.

TRADICIÓN RENOVADA Y USUARIOS FORMADOS

La Xunta, a través de Sogama, retoma así una práctica arraigada en nuestra comunidad, pero de una forma más moderna, higiénica y cómoda. Para ello, la compañía distribuye, a través de los ayuntamientos, y  de forma gratuita, compostadores con capacidad para 390-400 litros y fabricados con materiales reciclados y reciclables. A nivel municipal, estos recipientes son entregados por los propios entes locales a viviendas y agrupaciones que dispongan de terreno (jardín, huerto y/o tierras de cultivo) en el que aplicar el compost resultante, cerrando de esta forma el ciclo de recuperación de la materia orgánica, todo un ejemplo de economía circular.

A fin de que los participantes dispongan de la información y formación necesarias, y que el compost resultante cumpla con todos los requisitos contemplados en la legislación vigente, Sogama también se encarga de proporcionar a los usuarios diverso material divulgativo, pudiendo destacar los manuales didácticos de apoyo, en los que se explica de forma detallada todos los pasos a seguir: desde la propia ubicación del compostador, que debe colocarse en el exterior de la vivienda y en contacto directo con la tierra para facilitar la entrada de los microorganismos descomponedores, hasta la relación de materiales que deben (y no deben) introducirse en el mismo y el control de parámetros tales como el oxígeno, la temperatura y la humedad, que influirán de forma decisiva en el resultado final. También se da respuesta en los mismos a las preguntas y consultas más habituales.

Adicionalmente, personal de la empresa pública imparte cursos de formación presenciales en los que explican la técnica a aplicar y resuelven las dudas planteadas por los usuarios.

Con este programa, la Xunta pretende avanzar hacia una gestión más sostenible de los residuos municipales que tenga en cuenta el principio de proximidad,  ya que  la fracción orgánica se convierte en abono en las propias dependencias de los usuarios.